LA PÉRDIDA DE ESTRUCTURA ÓSEA VUELVE LOS HUESOS DÉBILES Y FRÁGILES, LO QUE LOS HACE MÁS PROPENSOS A FRACTURAS. ESTO SE PREVIENE CON UNA ALIMENTACIÓN ADECUADA.
Una de cada tres mujeres en el mundo, después de los 50 años, y uno de cada cinco hombres puede padecer de osteoporosis; pero después de los 60 o 70 años, hay un aumento significativo por envejecimiento de la población mundial, según destacó la Dra. Joan Levin, Presidenta de la Fundación de Osteoporosis y Enfermedades Metabólicas Óseas (FOSEMO), quien manifestó la importancia del trabajo en equipo y el valor de cada uno de los miembros de estos grupos en el ámbito laboral, durante la ponencia: “Es momento de actuar por tu salud ósea”, del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses (IMELCF).
La osteoporosis se define como una enfermedad generalizada del sistema esquelético, caracterizada por la pérdida de masa ósea y por el deterioro de la microarquitectura del tejido óseo, que compromete la resistencia ósea y que condiciona como consecuencia una mayor fragilidad ósea y una mayor susceptibilidad a las fracturas, de acuerdo con lo que indica el Ministerio de Salud (MINSA).
RAZÓN
Según la Dra. Débora Arosemena, Médico con Especialidad en Nutrición del Hospital Paitilla, los seres humanos vivimos un momento pico en nuestra masa ósea, durante el cual nuestros huesos están en su mejor forma, esto ocurre desde la niñez hasta alrededor de los 31 años, de ahí empieza a decaer. “Nuestra intención es tratar de mantener esa condición ósea y así prevenir la osteoporosis, en lugar de tratarla. Esto se logra con una alimentación adecuada desde edades tempranas, la cual irá variando con el crecimiento”. Por ejemplo, una persona en crecimiento y joven adulto requiere 1500 miligramos diarios de calcio para un desarrollo ideal. Luego de esto, puede ser un mantenimiento con 800 miligramos diarios hasta llegar a la menopausia, cuando la mujer empieza a perder el mineral, etapa en la cual debe incrementar la ingesta nuevamente a unos 1200 miligramos al día”, comenta.
CONDICIÓN
La osteoporosis implica la pérdida de estructura ósea, vuelve los huesos débiles y frágiles, por ende, más propensos a frac turas. Esta condición presenta diferentes niveles: osteopenia y osteoporosis. Arosemena destaca que es muy importante para la familia y los pediatras, detectar a tiempo a un adolescente que está bajo de peso o que no se está alimentando bien. “Tenemos condiciones como la anorexia o la bulimia, además de dietas aberrantes o un mal manejo de una dieta vegetariana o vegana que esté afectando los niveles necesarios de calcio”.
MEJORAR HÁBITOS
El consumo de bebidas carbonatadas, alcohol en exceso, cigarrillo, falta de actividad física y la historia familiar incide en tener la condición. Añadido a esto, para que nuestros huesos puedan absorber el calcio debemos revisar otros factores como los niveles de Vitamina D, si padecemos algún tipo de insuficiencia renal, patologías gastrointestinales (ya que ahí se absorbe el calcio), cáncer, entre otras. También tenemos una serie de medicamentos que producen pérdida de calcio por la orina, como los diuréticos, anticonvulsivantes, hormonas tiroideas, corticoides, algunas quimioterapias.
¿QUÉ HACER?
• En el caso de las mujeres se recomienda que el primer examen de densitometría ósea (a menos que el médico indique lo contrario) se realice a los 35 años.
• Si notamos ya una pérdida ósea, en cualquier edad, se recomienda el calcio, la vitamina D (si es necesario) y ejercicios, sobre todo caminar, complementado con otras actividades como pilates o yoga.
Fuente: Dra. Débora Arosemena. Además, el COVID-19 afectó por el sedentarismo generado y la falta de actividad física que es, de forma comprobada, causal de la pérdida de calcio. En el caso de haber padecido la enfermedad, debemos considerar el uso de corticoides y otros medicamentos que también generan pérdidas”, aclara Arosemena.